De mi saldrán lagunas y espadas
Un horizonte remendado con un hilo carmesí
Segundos que se pierden en la amargura de las hierbas
Burbujas de piel lozana y dulce y dorada
Gotitas de amor y de anís
De mi saldrán aullidos de ira
Y recorrerán los bosques fúnebres del silencio
Se perderán entre las lluvias y el viento
Y se unirán en un instante a ese gélido cubil
Se irán sin despedirse
Sin un solo adiós y ninguna mano agitada
Se irán y recorrerán el mundo en otras tierras
No habrá ningún reparo por su viaje
A mi vendrán días mejores
Perfumes que recorran nuestra piel
Un horizonte sin remiendo alguno
Un rayo de luz tan dulce como miel
A mi vendrán suspiros y canciones
Vendrán del valle del sonido
Vendrán del espeso y cálido fluido
Y se unirán en un instante a este vibrante corazón
Llegaran diciendo "Hola"
Desde lejos las manos agitándose
Correrán libremente en estas tierras
Correrán el riesgo de quedarse.
Como el más sincero de sus lectores (jajajaja) tengo el gusto de comentar primero...
ResponderEliminarasalta la inquietud: ¿ahora es marinero? depronto cojió un bus, pero ya quedó sin luz para salir al paradero, sin embargo ese man corre, talvez libre de enSorre tomando un poco de tinto o talvez el taRaMindo que nos hizo carcajear, hoy le vengo a comentar pa que goce de lo lindo.
Que dijo que con todo lo que me la paso viajando, no he aprendido décima??? usted ahora trabaja en una tierra donde la poesía y la tradición oral se viven, no se le olvide que por más bronceado sumercé es de tierra fría (no es crítica, de hecho es reiteración a lo que escribe)y viajar sólo lo alimenta más, disfrute el camino y admire la llegada.